SARMIENTO Y LA FORMACIÓN DE LA IDEOLOGÍA DE LA CLASE DOMINANTE

Alberdi en Facundo y su biógrafo dice: “Es el primer libro de historia que no tiene ni fecha ni data para los acontecimientos que refiere”[1]

(…) “¿Quiénes somos? ¿Adónde vamos? ¿Somos raza? ¿Cuáles son nuestros progenitores? ¿Somos Nación?[2]

Estas preguntas que Sarmiento formulara al comienzo de la conferencia en EE-UU donde sistematizara sus ideas sobre la Historia, condensan los interrogantes centrales que rondaron en el tiempo posterior a la revolución de 1810. La búsqueda de la identidad supone bucear en un pasado que hay que perfilar claramente porque de ello depende, en parte, la corrección y la justeza del perfilamiento futuro. Las ideas centrales de su concepción de la realidad social americana y de su historicidad serían….

1)      Reconoce la especificidad de América, habitado por pueblos salvajes ubicados en una escala inferior de civilización, estas circunstancias impiden que la historia americana sea analizada de acuerdo a conceptos pertenecientes a la filosofía europea, sino que hay que encontrar el carácter de los hechos sociales en las leyes generales americanas.

2)      Luego de las revoluciones independentistas, distingue dos realidades sociales: América del Norte y América del Sur. Esa diferencia radica en el carácter opuesto que tuvieron las colonizaciones inglesa y española. Mientras que la primera transmitió instituciones democráticas y libres, España legó las costumbres y tradiciones que permitieron la existencia de las tiranías en la parte sur de América.

3) Con el surgimiento de la democracia americana, la humanidad abandona los tiempos antiguos para empezar a transitar la modernidad, se despoja de las desigualdades de la vieja tradición para alcanzar la igualdad. Ese cambio histórico  permitió formular una ley: es la inteligencia y la voluntad los que posibilitan la asociación cono instancia organizativa de la que se deriva la democracia.

4) Se produce un conflicto entre lo viejo y lo nuevo, entre la desigualdad y la igualdad, derivadas de la resistencia al cambio sostenida por las tradiciones y costumbres, provenientes de una concepción social cuya base, la constituyen la tierra y los lazos de sangre.

5) La historia americana es la narración de la lucha entre la civilización y la barbarie que fundamentalmente se pueden dividir en dos etapas: a( Lucha por la independencia. B) lucha contra las tiranías que, como Rosas en el Río de la Plata y Gaspar Francia en Paraguay, expresan una concepción social retrógrada.

6) La concepción basada en la tierra y en los lazos de sangre, surgió en América por las características físicas del suelo y por las características de la colonización; de esta forma, los caudillos que Sarmiento analizó como el fenómeno visible de una problemática profunda, constituyeron una manifestación social.

7) Si la barbarie era una manifestación social, era necesario transformar la sociedad para erradicar aquellos elementos que impedían la igualdad. En este sentido, Sarmiento podía decir que la historia americana “se está haciendo”, porque el tránsito de una organización tradicional a una moderna aún no se había logrado.

El objetivo perseguido era que las provincias unidas arribaran a la modernidad, para ello hacía falta organizar las fuerzas que lograran ese tránsito; previamente había que comprender las razones que convocaban a que el cambio fuera necesario; describir el mal, buscarle los contornos, descubrir las conexiones, los nexos ocultos, mostrarlo y explicarlo. Los caudillos eran la manifestación de la barbarie, su trazo evidente, el “núcleo de la guerra civil” que agotaba al país provocando su retroceso.

Rosas era la cabeza del partido de la barbarie, de la organización retrógrada que alejaba al país del progreso. El partido de la barbarie y de la civilización, como expresión política de dos tendencias sociales antagónicas midiéndose en las guerras civiles, tiene una historicidad propia: corresponde a la etapa posterior a la revolución e independencia. En ese momento, la antigua red de lazos coloniales que daban forma a la autoridad (entendida como el convenio entre gobernantes y gobernados) había perdido fuerza. Desde que se produjo este fenómeno hasta que nuevamente se estableciera un convenio que diera origen a la autoridad nacional, tuvo lugar el federalismo.

“Aquel estado de transición se llama federalismo; y después de toda revolución y cambio consiguiente de autoridad, todas las naciones tienen sus días y sus intentos de federación”.

En todos los trabajos donde analizó a los caudillos, Sarmiento subrayó la adhesión popular que tenían; pero el nivel de reconocimiento de que eran objeto por parte de la población, no significaba más que describir en su totalidad el fenómeno de la barbarie. Encontrar en el caudillismo la explicación de aquellos resortes que frenaban el curso de la historia, no era circunscribir en las figuras de Aldao, Quiroga, López, Rosas, las razones del atraso; estas eran más profundas puesto que se remontaban a las consecuencias de la colonización española y eran sostenidas por las masas que en su ignorancia, solamente podían ofrecer como expresión política al caudillo. El círculo del atraso obedecía a la conjunción entre las masas oscuras e ignorantes y el caudillo, esa relación es la que va tejiendo el fenómeno de la barbarie como núcleo esencial que originaba la inmovilidad histórica, es, además, una descripción de las razones por las que la barbarie no podía ser sujeto histórico.

Sarmiento conceptualizó que el antagonismo a través del cual se desenvolvía la historia americana era el de la civilización y barbarie, desde el nivel en que se organizaban las fuerzas, o sea, el político, el enfrentamiento será entre la ciudad y el campo.

La educación sería pública y estaría organizada

La idea del orden se encontraba relacionada con la formación del Estado (…) la relación entre orden y Estado era tan estrecha que, se podría decir, conjugaban una relación de mutua necesidad: sin orden no había estado y sin estado no podía haber orden (…) Pero “el elemento principal del orden” lo constituiría algo externo a la realidad social argentina: la inmigración. Fundamentalmente, para Sarmiento, la llegada de una numerosa cantidad de inmigrantes traerá aparejado el orden en la medida que contrarrestaría la acción de la anarquía. Sería el estado el encargado de planificar la llegada del “elemento principal del orden” que, a su vez, proveería de riqueza, es decir, contribuiría a desarrollar la base económica sin la cual es estado no podría subsistir.

La inmigración y la educación eran los elementos principales para transitar desde la barbarie a la civilización; el estado sería el encargado de establecer el orden a partir de la planificación de medidas que atraerían la inmigración. También tendría en sus manos el control de la educación como la otra instancia fundamental que instauraría el orden. El “Estado ordenador” o el “orden estatal” que orientaría el paso de la barbarie a la civilización, surge de la concepción de la historia esgrimida por Sarmiento.

La construcción del Estado se relaciona con los sectores sociales que llevarían a cabo esta tarea y que, mediante un ordenamiento político, institucional, concretarían las etapas de su construcción. Como el estado era la mediación de la civilización, era la articulación a partir de la cual aquella podrá desarrollarse, los sectores sociales que construirían el estado, eran los que hacían la historia, eran el sujeto histórico.

Texto resumido y adaptado de LACAY, Celina, Sarmiento y la formación de la ideología de la clase dominante, Editorial Contrapunto, Bs. As, 1988.

(1) ALBERDI, Juan Bautista, Ensayo sobre la sociedad, los hombres y las cosas en Sud américa, T. VI, Bs. As., 1898, pág. 277.

[2] SARMIENTO, Domingo Faustino, Espíritu y condiciones de la historia en América en Cuatro Conferencias, páginas 31 y 32.