La escuela fisiocrática nace en Francia hacia mediados del siglo XVIII. Los fisiócratas centrarán su teoría económica en el desarrollo agrícola, considerando a esta actividad como la única capaz de generar un proceso de acumulación sostenido. La figura destacada de la fisiocracia fue Francois Quesnay, médico personal de Luis XV, que incursionó en economía tras haberse construido un considerable prestigio como relevante médico.
La sociedad francesa de la época era estamental y estrechamente relacionada con la posesión de la tierra. Se la conoce con el nombre de Antiguo Régimen, en referencia al estado de situación previo a la Revolución Francesa de 1789. Estaba dividida en tres Órdenes o Estados:
1- EL CLERO: conformado por las altas jerarquías de la Iglesia católica, institución que tenía un considerable poder en la sociedad francesa desde los tiempos medievales.
2- LA NOBLEZA: en el régimen feudal eran los caballeros, los guerreros, que en el desarrollo del Estado absolutista habían adquirido funciones más administrativas que militares. Mantenían sus privilegios de cuna, no tributaban impuestos, sólo podían ser juzgados por sus pares y eran los únicos que tenían acceso a los más altos cargos.
3- EL ESTADO LLANO: también llamado 3er Estado, estaba conformado por burgueses y campesinos. Sin el privilegio de nacimiento, la burguesía fue adquiriendo importancia económica y social. Si bien se enfrentan a los privilegios de la nobleza, aspiran a alcanzarlos.
Esta estructura social debe considerarse en el marco de un proceso histórico que abarcó al resto de las potencias europeas. Ya desde fines de la Edad Media se había iniciado un proceso de transición del feudalismo al capitalismo. Estos cambios estuvieron acompañados por la unificación de los Estados nacionales europeos, la consolidación del poder real, el avance de la burguesía y el surgimiento del pensamiento ilustrado. Entre los siglos XV y XVIII las guerras europeas estarán protagonizadas por los estados – naciones y será la razón de Estado la que prevalecerá sobre cualquier otra razón particularista.
La sociedad estamental era profundamente desigual y carecía en gran medida de movilidad social. El lugar que a cada uno le correspondía en el conjunto aún estaba fuertemente determinado por la clase en la que se nacía. En ese contexto, la escuela fisiocrática descreía del derecho natural de las personas hacia todas las cosas. Los fisiócratas apoyan explícitamente la desigualdad de las posesiones. En la literatura fisiocrática puede incluso encontrarse una ley de concentración creciente conforme va aumentando la riqueza de una sociedad, aumenta al mismo tiempo la desigualdad. Para que tuviera éxito la actuación del sistema económico, tal como lo imaginaron los fisiócratas, era necesaria una cierta desigualdad y por ello, esta ultima, lejos de ser considerada ofensiva, fue aclamada como algo socialmente útil y natural, que refleja las diferencias individuales, tanto en talentos, como en fortuna.